Lauaxeta ikastola es pionera en el uso del iPad como herramienta de aprendizaje. Pero “lo importante no es el dispositivo, sino el proyecto tecnológico de cada centro, con qué fin y a qué objetivo se quiere responder”, ya que “lo que hay detrás es un cambio metodológico, hay que trabajar de otra manera”, aseguran los profesores de esta cooperativa educativa.
Estudiantes de todas las edades, desde infantil hasta bachiller, utilizan con total naturalidad este el iPad en sus procesos de aprendizaje. “Queremos que nuestros alumnos sean ciudadanos digitales sanos”, aseguran los docentes, quienes afirman que este dispositivo les permite hacer cosas antes impensables, como utilizar formatos multimedia con los que los jóvenes están más familiarizados. “Son consumidores de información audiovisual, intentamos que también sean productores“, afirman.
Así por ejemplo, en Secundaria está implantado el proyecto 1×1, donde cada alumno dispone de una tablet. No hay libros de texto. El profesor cuelga los contenidos y materiales en la plataforma “Moodle” y desde allí también les evalúa. Este tipo de iniciativas se combina con otras para que los más pequeños trabajen la destreza manual.
La cooperativa de Amorebieta ha querido compartir con otros centros y profesionales sus experiencias y lecciones aprendidas, animándoles a que den un paso adelante basado en un planteamiento pedagógico, metodológico y didáctico avanzado, usando y aprovechando tecnologías innovadoras.
Enrique Rodal, de Radio Euskadi, habló sobre este tema con Aitor Pagaldai, responsable de Innovación de Lauaxeta y los profesores Jon Agirre e Iker Aburto.
Maria Teresa OJanguren, directora del centro educativo, explica el modelo educativo de la ikastola, donde los alumnos “aprenden a aprender”.
En diciembre, Lauaxeta celebró una jornada donde profesores, alumnos y el director de iPad España Pierre Cesinski, expusieron esta buena práctica ante 50 representantes docentes, institucionales y sociales. Tal ha sido el éxito de dicha presentación que la ikastola valora organizar un segundo encuentro para el que ya hay medio centenera de personas interesadas.