Un equipo multidisciplinar de expertos vascos, formado por criminólogos, psicólogos y educadores sociales, ha elaborado el programa PECI, Pre-intervención emocional en conflictos entre iguales, un sistema para prevenir los conflictos entre iguales antes de que se produzcan, que permite identificar las emociones de los niños a través del lenguaje no verbal. Juan Angel Anta, Esteban Etxebarria, Igor Cortón, y Pablo Cueva firman el siguiente artículo sobre este innovador sistema:
«Nuestra sociedad cada vez está más sensibilizada ante la violencia que nos rodea. Pero especialmente la que afecta a los menores. Son muchos los esfuerzos que se han realizado para aportar soluciones y se ha avanzado en la generación de sistemas de alerta ante la sospecha de casos en el entorno escolar. Pero, desde nuestro punto de vista, había una tarea muy importante que hacer para avanzar en herramientas para la prevención de estas conductas de maltrato entre iguales que tanto nos preocupan.
El Consorcio de Inteligencia Emocional es un ecosistema repleto de personas y organizaciones inquietas que buscamos nuevas soluciones a través de las aplicaciones de inteligencia emocional. Este es el contexto en el que nace el programa PECI, el de un espacio en el que profesionales con trayectorias diferentes nos unimos para colaborar y buscar nuevas propuestas. En este caso Juan Angel Anta, criminólogo y director del Grupo Detecta; Esteban Etxebarria, educador social del Grupo Detecta; Igor Cortón, psicólogo infanta juvenil y director del Área Psicológica del Centro Integral Psicoeducativo Haurbide; y Pablo Cueva, psicólogo sanitario y director de Poziktiba, hemos realizado un trabajo de hibridación de conocimientos fruto del cual es este programa.
PECI es un programa de prevención del maltrato entre iguales que se basa en tres pilares básicos:
– El trabajo de identificación de emociones. Una de las principales virtudes del programa es que capacita a los adultos implicados en la comunidad escolar a identificar las emociones teniendo en cuenta la comunicación verbal y la no verbal (expresiones faciales y gestos). Esto supone poder intervenir de una forma proactiva para prevenir situaciones de maltrato vinculados con que haya niños que no puedan o no quieran expresar sus emociones.
– Habilidades para la educación de la empatía. La segunda clave es la de adquirir competencias para identificar los elementos que activan del proceso natural de la empatía, así como los factores que la inhiben. Se trata de una formación práctica dirigida a ser empleada en los conflictos naturales y cotidianos.
– Interdisciplinariedad. PECI no solo incluye los más avanzados conocimientos de la criminología, de la psicología infanto-juvenil, o de la inteligencia emocional. Se trata de un programa que pretende generar una cultura de abordaje de los conflictos que sea común para profesores, padres y alumnos. Por eso plantea la necesidad de trabajar en paralelo con todos los agentes implicados.
– Modelo de gestión de conflictos. Todos los apartados anteriores se utilizan como herramientas con las que enfrentar los conflictos de otra manera. En este modelo la atención a la emocionalidad de las personas y el trabajo de empatía permiten acceder a otros modos de gestionar los conflictos.
– El programa incluye un apartado de co-creación con los agentes de cada centro educativo. De esta manera aseguramos una trasferencia entre las competencias adquiridas y el uso de las mismas en situaciones reales en el propio centro.
El pasado 17 de junio en Innobasque presentamos el programa ante más de 50 agentes del mundo educativo. La acogida ha sido muy buena por lo que pronto tendremos los primeros datos. En el camino de la prevención ya contamos con una nueva herramienta nacida de la mezcla entre las preocupaciones, los conocimientos y la experiencia. Un programa vasco que da firme sus primeros pasos para contribuir a mejorar nuestra capacidad de educar a nuestros hijos e hijas».