La tecnología ya permite que los aviones sean pilotados por robots, e incluso que sean pilotados por robots desde tierra. El desgraciado suceso que terminó con un Airbus 320 estrellado contra los Alpes el pasado 24 de marzo ha reabierto el debate sobre la seguridad en los vuelos comerciales.
¿Por qué todavía permitimos que los aviones sean pilotados por personas?, se pregunta la revista digital Motherboard, argumentando que hoy en día es posible tomar el control de un avión desde tierra, pilotarlo y aterrizarlo de manera segura reestablaciendo el piloto automático, que el copiloto Andreas Lubitz desconectó para con el fin de estrellar la aeronave.
Un informe de la Universidad de Duke en Estados Unidos apunta a que los pilotos apenas tocan los controles del aparato durante los vuelos. “De media los pilotos de Boeing pasan 7 minutos con los mandos de control” y los de “Airbus la mitad de ese tiempo, especialmente durante el despegue”. Esto lleva a pensar a que un avión comercial y un dron no son tan distintos.
Es cierto que el piloto automático no puede reaccionar ante cualquier imprevisto y los aviones 100% automatizados no son 100% seguros, pero tampoco lo son los pilotados por personas, como demuestran acontecimientos como los ataques del 11S o el de Germanwings.
Los Airbus pueden ser dirigidos por control remoto realizando algunos sencillos cambios, gracias a un sistema denominado “fly by wire”, según el cual las órdenes se emiten desde una estación de control en tierra. Surge entonces la duda sobre la seguridad de las comunicaciones. La expiloto militar e investigadora del Humans and Automation Lab del MIT Missy Cummings asegura que la encriptación de las señales soluciona este problema, tal y como sucede en los drones utilizados en defensa. De todos modos, los ordenadores de a bordo todavía podrían aterrizar el avión si se perdiera la señal. De hecho, Boeing ya ha patentado un sistema de piloto automático initerrumpible que podría despegar el avión.
Sin embargo, a pesar de que estos argumentos no son bien recibidos por la industria aeronáutica, Motherboard propone una combinación de piloto humano en la cabina y un robot en tierra. Esto supone dos ventajas principalmente: prevención de desastres provocados por secuestradores de aviones o pilotos suicidas y un considerable ahorro en los salarios de los copilotos humanos.
Sin embargo, parece que la tendencia es que los aviones de mercancías si volarán sin pilotos a bordo en un futuro, pero el piloto humano seguirá siendo necesario en los vuelos comerciales para poder interactuar con los pasajeros fundamentalmente. De todas formas, la agencia británica Astraea trabaja para que los vuelos comerciales sin piloto sean una realidad.